27. Enfoque.
“David preguntó…:¿Quién se cree este filisteo pagano, que se atreve a desafiar al ejército del Dios viviente?” 1 Samuel 17:26 NVI
El punto en donde ud. Ponga su enfoque definirá su actitud y su actitud definirá en buena parte el resultado. ¿De qué estoy hablando?… veamos la historia de David y Goliat.
Cuando el gigante Goliat campeón de los filisteos enfrentó al ejército de Israel, todo el mundo estaba asombrado por las dimensiones de Goliat, su fuerza, el tamaño y peso de sus armas, el enfoque del pueblo era Goliat y sus impresionantes estándares, por lo tanto, la opción era temor e intimidación y el resultado derrota. Téngalo en mente, cuando su enfoque esté en su enemigo y su fuerza la opción será el temor.
David, por el contrario nunca mencionó las dimensiones de Goliat, nunca puso a Goliat al frente, nunca comparó su fuerza con las del gigante, David no se enfocó en Goliat, David se enfocó en el Señor, y cuando usted se enfoca en Dios la opción es fe.
“¿Quien se cree este filisteo pagano?”… preguntó David. Todo lo que él veía era un hombre blasfemo desafiando a Dios, y nadie puede desafiar a DIOS y ganar la batalla.
Llegó el momento, cara a cara frente al gigante, y David una vez más se enfocó en el lugar correcto, en las fuerzas de Dios. Cuando el futuro rey mencionó las armas del gigante solo fue para compararlas con la fuerza de Dios: “Vienes a mi con lanza, espada y jabalina, YO VENGO EN NOMBRE DE JEHOVÁ DE LOS EJÉRCITOS”. Eso fue lo último que Goliat oyó en su vida… siguiente escena… gigante derrotado y David rumbo al trono.
¿Logra ver lo que David veía?… ¿Logra discernir en lo que David estaba enfocando?… la única oportunidad en la que aquel pastor mencionó las armas del gigante fue para demostrarle que esas armas eran nada comparadas a Jehová de los ejércitos, David se estaba enfocando en el lugar correcto.
David se enfocó en las fuerzas de Dios, en el poder de Dios, en su primer plano tenía a Dios, y cuando usted pone a Dios en primer plano, su enemigo se ve más pequeño. Deje de enfocar las grandes armas y fuerzas de Goliat: ese diagnóstico, temor, escasez económica, problemas en su casa, ¿cuál es el gigante o sus armas que le están intimidando?… olvídese de eso, vea al Señor todo poderoso infinitamente fuerte que peleará a su lado.
Recuérdelo, si enfoca las fuerzas de su enemigo, la opción será el temor y la derrota. Si usted se enfoca en Dios, la opción será fe, y con la fe movemos montañas.