6. Veo tu salvación – Episodio 3.
Lc. 2.30-32
30. Porque han visto mis ojos tu salvación,
31. que has preparado a la vista de todos los pueblos:
32. luz que ilumina a las naciones y gloria de tu pueblo Israel.’
Su búsqueda será determinante en esta navidad. Hemos viajado a través del maravilloso encuentro de Simeón con el niño Jesús alrededor de los días de navidad. Guiado por el ES encuentra al niño y a sus padres entre la multitud, carga al bebé de 40 días y exclama:
- “Han visto mis ojos tu salvación”… ¿la has visto tú?… ¿la anhelas?… el fin de las tormenta, el cese del dolor, de la preocupación y la angustia. Finalmente el rescate de esas aguas turbulentas y letales. Una familia a la deriva, finanzas a punto de naufragar, una condición de salud deplorable. Depresión, ansiedad, soledad, dolor… Un viejo piadoso rodea la historia navidad, los años han pasado, pero no ha perdido la esperanza, llegó el día, cara a cara exclama con alegría: “Veo finalmente la Salvación”.
- Es para todos los pueblos, es luz y gloria de las naciones. Me da esperanza, que la fortaleza de Simeón sea la nuestra. El niño en los brazos del viejo es salvación disponible a todos, es luz que diluye la detestable tiniebla, es rescate y autoridad. Usa esos beneficios de la Navidad, no los pases por alto. Que esta navidad se extienda nuestra vista a la salvación, Jesús es la salvación, Simeón maravillado por la navidad exclamó hay luz y gloria para la nación, y ahora lo creemos una vez más.
Esta navidad recuerde: “Si buscamos correctamente. Encontraremos SALVACIÓN”.
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